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Esta afirmaci?n proviene de Emilio de la Calzada, presidente de la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cant?brica a ra?z de una entrevista en la revista Fundaci?n Eroski
Aunque casi todo el territorio de la Cordillera Cant?brica posee m?s de un t?tulo de protecci?n (parque, reserva, lugar de inter?s comunitario, zona de especial protecci?n para las aves, etc.), en la pr?ctica las amenazas para su conservaci?n apenas entienden de estatus de protecci?n. As? de rotundo se muestra Emilio de la Calzada Lorenzo (Salas de la Ribera, Le?n, 1966), presidente de la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cant?brica. En este sentido, este bi?logo especialista en zoolog?a enumera diversos peligros que afectan a este entorno natural sin igual y a las especies que lo habitan, algunas de ellas ?nicas, y en riesgo de extinci?n.

¿Cu?les ser?an las amenazas m?s graves que afectan a la Cordillera Cant?brica?

Las que someten al patr?n humano los espacios en los que los procesos naturales todav?a ocurren de manera espont?nea. Sin pretender establecer un orden de importancia, citar?a las siguientes:

  • El actual sistema de explotaci?n del carb?n a cielo abierto: infinidad de enormes m?quinas y millones de toneladas de explosivos est?n, literalmente, desmantelando amplios espacios de la montaña cant?brica, despoj?ndolos de cualquier atisbo de vida e inutiliz?ndolos definitivamente para cumplir su papel ecol?gico, subvencionado con el dinero p?blico.
  • El sector de la intervenci?n forestal: ha experimentado un impulso sin precedentes en las dos ?ltimas d?cadas al amparo de los fondos europeos y gracias a la nueva maquinaria. Los espacios m?s inaccesibles han sido expuestos al tr?fico rodado. Los todoterrenos y los quads nos llevan a rincones, hasta ahora libres de la acci?n humana, gracias a la infinita red de pistas forestales. Adem?s, miles de hect?reas de empinadas laderas han sido roturadas, subsoladas u hoyadas para promover el crecimiento acelerado del estrato arb?reo.
  • Los incendios forestales: uno de los territorios m?s h?medos de la Pen?nsula Ib?rica soporta el mayor n?mero de incendios, tanto en verano como en invierno.
  • Los centenares de parques e?licos: se adueñan de muchos cordales montañosos, empequeñecen para siempre nuestros horizontes, adem?s de eliminar de un plumazo la calidad ambiental de estos espacios.
  • Las grandes infraestructuras viarias (autov?as, autopistas y l?neas de alta velocidad) representan, a lo largo de grandes tramos, barreras infranqueables para la fauna terrestre, por lo que compartimentan el territorio.
Se suele reprochar a las asociaciones conservacionistas su supuesta falta de realismo al posicionarse contra la construcci?n de infraestructuras o la ubicaci?n de aerogeneradores en zonas naturales. ¿Qu? opina al respecto?

Podremos pecar de idealismo, pero no de desinformaci?n. Lo que ocurre, las m?s de las veces, es que para justificar el despilfarro, la ineficiencia o los intereses inconfesables en torno a muchas obras y proyectos, sus promotores hacen uso ante el "gran p?blico" de la m?s llana demagogia para conseguir la aprobaci?n de "sus" partidas presupuestarias. Cuando aparecemos los ecologistas poniendo los puntos sobre las ies y nombrando lo innombrable somos tildados, parad?jicamente, de antisociales y antiprogreso.

Ahora que nos encontramos en plena temporada de esqu?, ¿hasta qu? punto afecta a la naturaleza de esta zona?

El esqu? alpino y todas las infraestructuras que sostienen esta modalidad merecen ocupar tambi?n un puesto destacado entre las amenazas ambientales que penden sobre la cordillera. En este sentido, el esqu? alpino, impulsado especialmente por las administraciones regionales y provinciales del ?mbito cant?brico, es el reclamo para garantizar la viabilidad de proyectos urban?sticos residenciales en la montaña.

¿C?mo afecta el esqu? alpino al medio ambiente de la cordillera?

Sin entrar a valorar la desfavorable coyuntura clim?tica actual, ni el despilfarro econ?mico y energ?tico de producir nieve artificial (indispensable para las estaciones de la cordillera), sus repercusiones ambientales son m?ltiples, graves y totalmente desconocidas para el gran p?blico que, en muchas ocasiones, considera esta actividad en plena armon?a con la naturaleza. Y es que la construcci?n de una estaci?n de esqu? comporta enormes transformaciones en la alta montaña, invisibles en la ?poca invernal, pero que se revelan con toda su crudeza el resto del año. Las grandes aglomeraciones humanas que se concentran estacionalmente generan graves problemas de eutrofizaci?n de las aguas en sus mismos nacederos y de compactaci?n y contaminaci?n de los suelos.

¿Es posible la pr?ctica de este deporte de manera sostenible?

Para los amantes del binomio nieve-montaña, hay otras modalidades mucho menos agresivas y m?s pr?ximas a la idea de deporte, como el esqu? de traves?a, el esqu? n?rdico o la traves?a con raquetas.

¿C?mo podr?an combatirse las amenazas a las que hac?a referencia?

A trav?s de nuevos modos de relaci?n con nuestro planeta, que implican cambios de mentalidad social, pol?tica y econ?mica y por el reconocimiento inequ?voco de que una naturaleza bien conservada es la mejor garant?a para nuestro porvenir.

Desde un punto de vista m?s pr?ctico, bastar?a con exigir el cumplimiento de una buena parte de la legislaci?n ambiental. Aunque tristemente observamos c?mo las propias administraciones p?blicas, encargadas de velar por la conservaci?n del medio ambiente, son las que vulneran en mayor medida las normas ambientales.

¿C?mo pueden los consumidores colaborar para que se eviten o reduzcan estas amenazas? 

A trav?s de la concienciaci?n ambiental y del consumo responsable. Cada d?a tenemos acceso a una mayor informaci?n y d?a a d?a se hace m?s patente la necesidad de un cambio de relaci?n con el entorno, lo que debe conducirnos a asumir cierta renuncia y cierta moderaci?n en el consumo, que a la larga se torna en ventaja.

La costa mediterr?nea es utilizada frecuentemente como ejemplo de urbanismo descontrolado, con su consecuente impacto ambiental. ¿Y en el caso de la costa cant?brica?

Debido sin duda a su "peor" clima, la costa norte ha sufrido una menor presi?n urban?stica que la mediterr?nea. Sin embargo, a lo largo de la ?ltima d?cada la fiebre constructora comenz? a poner en jaque, con grandes proyectos urban?sticos, algunos espacios de la costa lucense, asturiana y c?ntabra. No obstante, debido a la reciente y profunda crisis del sector inmobiliario, muchos de ellos han quedado en meros proyectos.

¿Cu?les son las especies m?s caracter?sticas de la Cordillera Cant?brica?

Uno de los principales activos de la Cordillera Cant?brica es su biodiversidad. El hecho de estar empapada por las dos realidades ecol?gicas de la Pen?nsula, la mediterr?nea y la eurosiberiana, unido a su intrincada orograf?a, hace que en ella tengan cabida multitud de ambientes que dan cobijo a una variada flora y fauna. Hay numerosas especies vegetales y varias especies animales end?micas (que ?nicamente se pueden encontrar en estas montañas). De entre todas ellas podemos destacar, por su mayor "popularidad", la salamandra rabilarga, la liebre de piornal o el urogallo cant?brico. Muchas de ellas se encuentran en un delicado estado de conservaci?n e incluso en peligro de extinci?n.

¿Y el oso pardo?

Es una de las especies que mejor refleja tanto el grado de conservaci?n como los problemas actuales de la cordillera. Despu?s de algo m?s de dos d?cadas de esfuerzos de conservaci?n, en forma de importantes fondos econ?micos, hay algunos osos m?s en la cordillera que hace 15 años (aunque muchos menos, sin duda, que hace un siglo), quiz? debido a que se matan menos osos que en d?cadas pasadas, lo que no quiere decir que el furtivismo est? erradicado. Este ligero incremento poblacional est? ocurriendo de manera paralela a la destrucci?n, fragmentaci?n y p?rdida de calidad de su h?bitat, provocado, todo ello, por las amenazas ambientales citadas anteriormente. Esta p?rdida y deterioro del h?bitat van a hipotecar la recuperaci?n futura de la poblaci?n cant?brica, ya que no hay mucho espacio donde puedan vivir varios cientos de osos, cantidad m?nima considerada como "poblaci?n viable" por los ec?logos.

Por lo tanto, el riesgo de extinci?n contin?a.

Cada d?a disponen de menos h?bitat de calidad, lo que lleva a situaciones poco deseables: alimentaci?n suplementaria, por cierto fuera de control; osos cerca de poblaciones humanas, lo que supone un aumento de riesgos para osos y humanos; multitud de actividades humanas en zonas "salvajes", con la consecuente p?rdida de h?bitat y tranquilidad; y atropellos, entre otros muchos factores.

¿Qu? lugares destacar?a por su belleza o por su especial inter?s natural?

La belleza es muy subjetiva, pero sin lugar a dudas, la espectacularidad de los enormes desniveles calc?reos de los Picos de Europa no deja indiferente a nadie. Y desde el punto de vista del inter?s natural, quiz? sean los bosques caducifolios cant?bricos los elementos m?s valiosos, ya que albergan las comunidades biol?gicas m?s diversas, son el escenario de los procesos naturales m?s complejos y adem?s desempeñan algunos de los papeles ecol?gicos m?s importantes para nuestra sociedad: regulan el ciclo hidrol?gico, atemperan el clima, previenen contra la erosi?n, fijan contaminantes y desintoxican la atm?sfera.

Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cant?brica

La Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cant?brica es una asociaci?n creada en 2003 con el objetivo de promover la conservaci?n de todo este conjunto montañoso. Su actual presidente, Emilio de la Calzada, explica que la raz?n de ser de esta iniciativa se basa en dos aspectos b?sicos. El primero tiene que ver con la importancia de abordar globalmente los sistemas naturales, ya que una cordillera posee entidad ecol?gica m?s all? de los l?mites administrativos. El segundo reside en la enorme diversidad biol?gica y ecol?gica que encierra la Cordillera Cant?brica, y que deber?a hacerla acreedora del grado m?ximo de protecci?n.

La Plataforma, adem?s del trabajo conservacionista de sus responsables y colaboradores, lleva a cabo una importante labor de educaci?n ambiental para fomentar el respeto a los valores de la Cordillera Cant?brica. Por ejemplo, sus miembros han presentado recientemente "Las montañas del Norte", un DVD en el que, con la narraci?n del popular naturista Joaqu?n Araujo, se da a conocer su riqueza natural.

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