Proyecto realizado por el gabinete andorrano de instalaciones de estaciones de montaña, SEMSA (Serveis i Equipaments de Muntanya, S.A.), bajo encargo de la asociación de empresarios Tres Provincias S.A que ha tomado como referente los borradores y estudios que, desde hace algo más de dos años, lleva realizando a pie de campo el ingeniero de minas y consultor Roberto Arnáiz.
El Proyecto de SEMSA, que contempla una inversión de 70 millones de euros para la estación de San Glorio, propone varias entradas al complejo invernal por las que se accedería a través de telecabinas, a excepción de la entrada leonesa en Portilla de la Reina que podrá hacerse por carretera. Este acceso rodado se prevé únicamente hasta la cota 1.550, y no hasta la 1.800 como plantean otros estudios que resultan totalmente inviables y gravemente perjudiciales en lo que a impacto ambiental y explotación del centro invernal se refiere.
Con esta propuesta se pretende evitar el impacto ambiental que supondría la construcción de nuevas vías en una zona natural protegida como esta. Por ello tan solo se contempla en el estudio, y siempre en el caso que fuera necesario, el acondicionamiento de alguna pista forestal ya existente para facilitar los accesos hasta los telecabinas, causando así una repercusión ambiental mínima. La instalación de telecabinas resulta además un recurso importante para el complejo invernal ya que las mismas podrán utilizarse durante todo el año para el desarrollo de actividades de verano con la expedición de forfaits y abonos estivales con acceso a actividades multiaventura y deportivas en el propio centro de montaña. Con esto se importa el concepto de “Mountain Resort” nacido en Estados Unidos, y que se lleva experimentando con éxito en España en estaciones invernales como Boi Taull en Lérida (45 Km de pistas) o Soldeu-El Tarter y Pas de la casa-Grau Roig (Grandvalira) en Andorra (200 Km de pistas).
Así, se contempla una primera entrada por Las Lomas, en el pueblo palentino de Cardaño de Arriba, con un telecabina de 2 Km de recorrido hasta alcanzar la cota 2.000, en el sector de las Guadañas, y con capacidad para soportar 3.000 esquiadores por hora. La otra entrada se ubica en el propio Puerto de San Glorio, pero no en su punto superior, sino a una altura de 1.440 m en la denominada Majada de los Pastores, que se elevará hasta la cota 2.100, en el sector Cubil del Can. La tercera entrada será la de Portilla de la Reina, hasta el sector Hoyo Empedrado. En esta población también se plantea la construcción de otro aparcamiento del que partirán los remontes hacia la zona esquiables de Lechada, Rios Vargas y Naranco. En un primer momento se valoró la posibilidad de crear otro acceso por la zona de Llánaves de la Reina, aunque finalmente esta opción se ha descartado al existir accesos cercanos por Portilla y Liébana, una medida que preserva el espacio y evita causar un impacto ambiental considerado del todo innecesario.
Todos los sectores planteados estarán perfectamente interconectados entre sí para así poder asegurar un dominio esquiable total de hasta 80 Km de pistas. A esto habría que añadirle rutas fuera de pista calificadas como de las mejores de España. El proyecto asegura que se tratará de una estación literalmente ‘colgada’ en la montaña sin que pueda ser visible prácticamente desde ningún punto de los valles circundantes, lo cual, y debido precisamente a la mínima actuación en cuanto a la construcción de carreteras se refiere en pro de la utilización de transporte por cable para los accesos, es sin duda una apuesta clara por la minimización del impacto ambiental en la puesta en marcha de la estación. El proyecto se sitúa sin duda a años luz de otros planteamientos barajados, ya que ha sido realizado por profesionales de construcción y gestión de estaciones de montaña, el gabinete andorrano SEMSA.
La utilización de telecabinas y telesillas en el parque de remontes en vez de telesquís, asegura una mayor capacidad de esquiadores/hora así como un impacto ambiental mínimo ya que los remontes mecánicos serán de última generación y se ubicarán de forma estratégica para instalar el menor número posible con una mayor conexión y acceso entre pistas.
La estación de esquí que se plantea en el proyecto elaborado por SEMSA ofrece a los esquiadores la posibilidad de utilizar hasta 80 kilómetros de pistas, todas ellas interconectadas, de modo que, independientemente de la zona por la que se acceda al complejo invernal, el desplazamiento a través de remontes permitirá el uso de la totalidad de las pistas a los usuarios. La longitud total del dominio esquiable resulta significativo si se realiza una comparativa con otras estaciones de esquí españolas de gran magnitud ya que, por poner un claro ejemplo, la estación andorrana de Pas de la Casa sería la única que superaría a San Glorio en longitud de pistas. Por debajo se encontrarían Baqueira-Beret, en Lérida, con 77 Kilómetros, o San Isidro, por realizar una comparativa más cercana, donde tan solo hay 22 kilómetros de pistas.
La capacidad de esquiadores por hora que puede llegar a soportar la futura estación de San Glorio si el proyecto que se plantea se llevase a cabo, baraja cifras de hasta 32.500 esquiadores por hora. Este proyecto vuelve así a distanciarse notablemente con otros planteamientos barajados que planean una capacidad remontadora de apenas 3.000 personas, muy por debajo incluso de la ya existente estación de San Isidro, con 11.500 personas por hora.
Se trata este sin duda de un factor muy importante a tener en cuenta si, sobre todo, se compara con otras estaciones importantes a nivel nacional como la de Pas de la Casa, en Andorra, donde la capacidad llega a los 47.000 esquiadores, o la estación invernal de Baqueira Beret, con una capacidad de 30.500 esquiadores a la hora.
El área esquiable se repartiría de la siguiente manera. Accediendo por el pueblo palentino de Cardaño de Arriba, se entra en el sector denominado Las Guadañas, que dispone de entre 8 y 10 Kilómetros de pistas esquiables y que quedaría totalmente apartado de las lagunas del Parque Natural de Fuentes Carrionas. La entrada por Portilla al sector denominado Naranco y Lechada, en la provincia de León, ofrece 15 y 40 Kilómetros de pistas respectivamente, mientras que el acceso por Liébana al sector de Cubil del Can, en Cantabria, permitirá la utilización adicional de otros 15 kilómetros de pistas esquiables.
Para favorecer la interconexión entre pistas se instalarán telecabinas y telesillas, concretamente 2 telecabinas de 6 plazas, 4 telesillas de 6 plazas desembragables, 3 telesillas de 4 plazas desembragables, y otros 7 telesillas de 4 plazas de pinza fija para las zonas de mayor altura. En total contaría con un parque de 16 remontes de última generación.
El estudio de SEMSA valora además la capacidad de esquiadores por hora que podría soportar la estación en diferentes situaciones de afluencia, y se calcula que en un día denominado de calidad, con colas de espera de tan solo 6 minutos, la cifra de personas en la estación sería de 12.350, mientras que en un día denominado de saturación, con 12 minutos de espera en colas, la cifra de personas en la estación sería de 22.000. resultan cifras significativas si se comparan con las de otras estaciones a nivel nacional.
La estación de San Glorio asegurará además la fidelidad de los futuros clientes garantizando una fecha de apertura del complejo de montaña al inicio de temporada y en torno a mediados de noviembre. Esto se consigue con la privilegiada situación de la estación con cotas esquiables de hasta 2.500 metros (la cota máxima de San Isidro es de 2.000 y la de Pajares de 1.850 metros), y con la instalación de una moderna red de producción de nieve por cañones, que daría servicio a unos 22 kilómetros de pistas, con la cual además se asegura la nieve en cotas bajas y en los enlaces entre los diferentes sectores esquiables antes mencionados.
Resulta fundamental tener en cuenta que el proyecto que se plantea determina claramente por factores territoriales y sociológicos que el mayor número de afluencia de esquiadores será aportado por la zona palentina de la estación de esquí. Así mismo el territorio cántabro ofrecerá la máxima conexión por esta zona a la estación, mientras que el área leonesa es la que aporta el mayor dominio esquiable de la futura estación.
Por todo esto, en el proyecto se recoge como necesaria la compensación a esta aportación leonesa y la forma que se determina para ello es logrando una permeabilidad entre la franja que territorialmente divide a las provincias de León y Palencia dotando a la zona de infraestructuras viarias óptimas, ya que, al fin y al cabo, esto es lo que atrae una mayor afluencia de visitantes. Para conseguirlo, resulta fundamental la implicación directa e inmediata de las diferentes administraciones (Junta de Castilla y León, diputaciones de León y Palencia y Ayuntamientos) a la hora de acometer obras de mejora en las carreteras de acceso existentes e incluso para valorar conjuntamente la posible variación de proyectos que en estos momentos están a punto de ejecutarse, como el caso del corredor del Nalón desde el puerto de Tarna hasta Palencia pasando por Boca de Huérgano, teniendo en cuenta la necesidad de cubrir la demanda de los futuros usuarios de la estación invernal que nos visitasen desde el Principado de Asturias.
Así mismo, el proyecto realiza el mismo planteamiento en el acceso por el Puerto de San Glorio, entre Potes y Boca de Huérgano, y entre Posada de Valdeón y Portilla de la Reina a través de la carretera de Santa Marina, cuyas obras recientemente han sido adjudicadas.
Aunque por el momento no se ha valorado como una medida compensatoria en sí misma, el proyecto de la futura estación expuesto plantea la entrada leonesa de Portilla de la Reina como el único acceso por carretera a las instalaciones de San Glorio, lo cual implícitamente supone una opción importante para la infraestructura hotelera y hostelera existente, que deberá ponerse en marcha para cubrir la importante demanda que, según las previsiones, generaría la construcción de la estación de esquí proyectada por SEMSA.
El resto de los accesos se realizarían mediante telecabinas, por lo que los usuarios no podrán, excepto por la zona leonesa, disfrutar de las ofertas hosteleras y de ocio de la comarca de Riaño, por lo que resulta, al menos a priori, una ventaja para los leoneses con respecto al resto de los accesos por otras provincias.
Es de suma importancia destacar que el proyecto expuesto no plantea la construcción de hoteles o de centros deportivos como pistas de hielo, áreas comerciales, etc… en las diversas bases de la estación, sino que se pretende que todas las construcciones destinadas a tales fines se desarrollen en los pueblos de la zona para aprovechar al máximo el desarrollo de las comarcas así como minimizar el impacto ambiental en plena montaña.
En la presentación de la Iniciativa para el Desarrollo de la Estación Invernal San Glorio se destacan las óptimas condiciones para construir una estación de esquí, que se situaría entre las mejores del país. Así, y según algunos estudios, la estación tendría 1.500 hectáreas por encima de la cota de 2.000 metros de altitud y una máxima de 2.500 metros.
A esta privilegiada situación habría que sumar la fuerte innivación, el clima seco y frío que no tiene la influencia del Cantábrico debido a la barrera natural de los Picos de Europa, situados frente a la zona, así como la anchura y longitud de sus pistas que convertirían a esta estación en una zona privilegiada para los amantes del esquí